lunes, 17 de agosto de 2009

IMPLANTOLOGÍA ORAL


La Implantología dental, si bien es una ciencia joven, cuenta ya con varias décadas de experiencia y constantes evoluciones y mejoras. Actualmente no se puede comparar ni los implantes que tenemos a nuestro alcance para satisfacer las necesidades de nuestros pacientes ni los conocimientos técnico-fisiológicos sobre el hueso maxilar soporte de dichos implantes.
Como toda rama de la medicina, y más aún al ir de la mano con la tecnología, avanza día a día; y es imperativo contar con dichos avances para poder solucionar de la forma más apropiada, aquellos casos de pérdidas de dientes naturales que se nos presenten en nuestros Centros Dentales.
Teniendo siempre como factor condicionante la cantidad y calidad del hueso maxilar, casos que hace unos años atrás no se podían rehabilitar mediante implantes dentales, hoy por hoy, pueden solucionarse convenientemente mediante distintas técnicas y distintos diseños de implantes dentales. Entre ellos podemos mencionar:
· técnica de carga inmediata (en tan sólo unas horas puede volver a tener dientes fijos)
· mini implantes dentales ( aún con muy poca cantidad de hueso y sin necesidad de injertos se puede recuperar una dentición estética y funcional)
· implantes ultracortos ( aún en casos extremos, mediante el uso de implantes de 5mm a 8 mm de longitud y 5 mm de diámetro )
· implantes flexibles ( cuyo titanio grado 5 del cuello del implante nos permite flexionarlo para paralelizarlo con los proximales)
· Prótesis fijas de porcelana sobre implantes
· Prótesis fijas atornilladas sobre implantes
· Sobredentaduras removibles sobre implantes dentales
· Cirugías mínimamente invasivas
Todo este arsenal implantológico nos permite solucionar infinidad de casos de manera efectiva y predecible en el tiempo.
Es innecesario padecer con prótesis removibles que se mueven al hablar o al comer, que se sujetan mediante ganchos metálicos que van desgastando y rompiendo las piezas naturales remanentes, teniendo que usar pegas o adhesivos de prótesis, sufriendo llagas o rozaduras, etc. Tener una boca sana y de aspecto agradable no es un lujo sino una necesidad para tener una buena calidad de vida.